No Entiendo Nada: Más falsa que el hambre (ÉL)

Y más puta que las pesetas. Esta semana está repleta de refranes, mi madre intenta asesinar a mi abuela a base de glucosa. "Morir con gusto, no cuesta tanto". O mi refrán inventado de "No paras de regar sobre mojado".

Hay una canción para cada momento de la vida, y un refrán al parecer también. La gente no para de sorprenderme, cuando te crees que lo has visto todo, y poco puede asustarte... Zas... y de pronto desorientado vuelves al punto de partida, y qué es lo que dices sucesivas veces en voz alta, yo... es que no entiendo nada.

La mudanza viento en popa, y las cosas en casa comienzan a estabilizarse, a dos días días de fin de año, la ropa escogida y el antiojeras en mano, una crisis de ansiedad está apunto de sobrellevarme cuando a menos de 48 horas de dar una patada al 2008 estoy sin entrada de fin de año. El que no corre vuela, y en este caso, han volado las entradas para mi local predilecto, así que 200 euros en mano me praparo para buscar una barra libre a precio desorbitado a cambio de pasar una noche con 4000 personas más en un garito en el cuál los dueños desconozcan la palabra AFORO. Por supuesto lo de barra "libre" es otro tópico de la falsedad navideña, por qué que tiene la barra de libre cuando intentas pedir una copa y te topas con 300 personas más?

Champan en la nevera, alianza de oro preparada, deseo en reflexión, ...

Ya te comiste las uvas, y de repente, tú tía grita que eran los cuartos. Como en una película de las 15.'00 en telecinco. El espíritu de todos los años... vuelve a mostrarnos el panorama de siempre.